Identificada

Bueno, Hola chicas. Mi entrada anterior fue en un momento de total desesperación y odio hacia a mí misma. Y todavía me siento así. Es por eso que cuando leí esto me empezaron a picar los ojos. Sin nada más que decirles, se los dejo.

Estas allí, acostada, en silencio, esperando por esa sensación que todas las noches te invade. La habitación esta oscura y sabes que nadie te escucha. Es cuando comienzas a sentirlo.

No sabes por cuanto tiempo has estado allí en silencio, pero reconoces que es bastante tiempo. Giras tu cuerpo a un costado te cubres con la sabana, y el nudo es tu garganta ya esta allí.

Suspiras, y tu mente comienza recordar cosas que has ocultado ante la gente, ante todos, pero no lo puedes ocultar de ti, ya no puedes huir y te rindes, cierras los ojos y abrazas tu almohada preguntándote porque.

Tu respiración se dificulta y en tu cabeza voces repiten lo mismo “No eres suficiente”, “Inutil”… Ya no lo puedes controlar y de esa manera la primera lagrima sale. Cae lentamente por tu mejilla y aunque no la veas sabes que es cristalina. Después de eso te derrumbas, ya no puedes contenerte por más tiempo, tus lagrimas caen por tu rostro y no encuentras la manera de detenerlas, asi que lloras.

Lloras porque has pasado todo el día fingiendo, y pretendiendo ser algo que ya no eres. 

Lloras porque tu mejor esfuerzo no es suficiente.

Lloras porque quieres que alguien te mire a los ojos y sin decir nada te abrace. Tan fuerte que puedas derrumbarte y aún así confiar en que esa persona puede mantener los pedazos de tu destrozada alma juntos. 

¿Cuanto tiempo ha pasado ya? ¿Minutos? ¿Horas? Has perdido la noción del tiempo, pero sabes que ha pasado mucho porque tus ojos se están quedando sin lagrimas.

Te sientes cansada, y sin más, con un pequeño suspiro cierras tus ojos, aprietas un poco mas tu almohada, te encoges. En ese momento estas indefensa, en ese momento eres vulnerable y tu ultimo pensamiento de la noche es “Mañana sera diferente” y lo repites en tu mente deseando poder creer que mañana sera diferente, pero en el fondo sabes que será igual.

Al día siguiente despiertas, te diriges al baño, ves tu rostro en el espejo, luce cansado, los círculos al rededor de tus ojos son más oscuros, la tristeza es cada vez más notoria en tus ojos, pero sabes que no importa, nadie los vera de cerca, nadie se tomara el tiempo de apreciar que en esos ojos guardas tus secretos más oscuros.

Lavas tu cara, te bañas, te arreglas y otra vez te encuentras parada enfrente del espejo, esta vez para maquillarte y mejorar un poco tu aspecto, aplicas la base, la sombra, el rubor, mascara para las pestañas y una vez mas estas lista. 

Lista para salir y aparentar, lista para salir y pretender que el mundo se detiene a tus pies. Lista para ir y enfrentarlo todo con esa sonrisa falsa, que todo el mundo cree. Das un ultimo vistazo a tu reflejo “¿Cuando acabara esto?” preguntas sabiendo que no obtendrás respuestas. Sabiendo que jamás terminara.